Para unos labios naturales: Se utiliza el lápiz delineador del tono más parecido al rojo de labios que se vaya a utilizar, siguiendo su forma natural.
Para unos labios con volumen: Se perfila el labio con un tono más oscuro que el labial y, a continuación,se aplica un brillo de labios. Los colores claros y luminosos aportan volumen a unos labios finos, y los oscuros y mates restan volumen a los demasiado gruesos.
A la hora de aplicar lápiz de ojos: empieza por la zona del lagrimal, aunque parezca extraño, así quedará más natural.
Para el contorno de los ojos: esta zona es la más sensible que el resto de tu rostro, por eso, a la hora de aplicar cremas, correctores, etc. es mejor que utilices el dedo anular (el de al lado del meñique) porque ejerce menos presión.